Libérate de Deudas Impagables: La Exoneración del Pasivo Insatisfecho bajo la Ley de la Segunda Oportunidad

La exoneración del pasivo insatisfecho (EPI) es un proceso legal que permite a las personas liberarse de deudas que son imposibles de pagar. Este procedimiento, amparado por la Ley de la Segunda Oportunidad, busca otorgar un nuevo comienzo a aquellos que se encuentran en situación de insolvencia.

El EPI, abreviatura de exoneración del pasivo insatisfecho, fue establecido en 2015 para garantizar que las personas físicas insolventes no se vieran obligadas a pagar deudas abrumadoras. Este mecanismo, antes conocido como Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI), eliminó el término «beneficio» en 2022 debido a su connotación negativa en relación con la difícil situación de los deudores.

Modalidades principales de EPI contempladas en la ley

1. **EPI definitiva**: Esta forma de exoneración cancela todas las deudas pendientes del deudor, tanto públicas como privadas, siempre que liquide sus activos. Se requiere que el deudor demuestre su idoneidad para la exoneración presentando sus declaraciones de impuestos de los últimos tres años.

2. **EPI provisional**: En este caso, el deudor es liberado de algunas deudas a cambio de seguir un plan de pagos. Una vez que complete este plan, todas las deudas pendientes son canceladas. A diferencia de la EPI definitiva, el deudor no necesita liquidar sus activos, pero debe aceptar que la exoneración se registre públicamente. También debe presentar sus declaraciones de impuestos de los últimos tres años al solicitar esta modalidad.

El proceso de EPI se simplificó en 2022 al eliminar ciertos requisitos previos, como la negociación extrajudicial con los acreedores o la solicitud de concurso consecutivo. Ahora, todo el procedimiento se lleva a cabo ante un tribunal, donde un juez, junto con un abogado y un procurador, evalúan la viabilidad de la solicitud. Si se aprueba, la exoneración se concede mediante auto judicial, aunque los acreedores aún pueden solicitar su revocación bajo ciertas circunstancias, como la ocultación de activos por parte del deudor o una mejora significativa en su situación financiera.

Para beneficiarse del EPI, el deudor debe cumplir con ciertos requisitos, incluyendo ser una persona física, haberse declarado en insolvencia, tener al menos dos acreedores y actuar de buena fe. Sin embargo, aquellos condenados por ciertos delitos financieros en los últimos diez años no son elegibles para la exoneración del pasivo insatisfecho.

En resumen, la exoneración del pasivo insatisfecho bajo la Ley de la Segunda Oportunidad ofrece a las personas insolventes la posibilidad de comenzar de nuevo al cancelar deudas imposibles de pagar, siempre que cumplan con los requisitos establecidos por la ley.

5/5 - (1 voto)

¿Te ha gustado este artículo?

5/5 - (1 voto)

También te puede interesar

Encuentra tu abogado

Especialidades